Películas

Te gustaría que tus romances fuesen como en las películas, sentir ese fuego que más bien te llena en vez de quemar, sentir que pasan segundos cuando en realidad son horas, te gustaría sentir ese amor que es como en las películas, donde todo empieza cuando menos te los esperas, escuchas canciones mientras te hablo, dices que es parte de tu banda sonora.

Escuchas música, la llevas a todas partes donde caminas, quieres que tu amor sea como en las películas.

Te mencioné que ese amor no vale la pena, la vida es larga y estos romances duran una hora y unos cuantos minutos obviando los créditos, quieres un romance como en las películas y yo me quiero en tu vida.

¿Quién te asegura que serías el personaje principal? Dime dónde son las audiciones, te gusta ver películas para llorar por un rato, así te puedes victimar más y tu quedarías como el “bueno”, perdón pero obvie los créditos al final de la película, me di cuenta que ahí estaba el mensaje que me querías entregar.

Con una canción de Beck, la que suena cuando mi chaqueta y mi pelo se impregnan de lluvia, quisiste que tus romances fueran como en las películas, lograste un final inesperado, y estamos como todo el mundo a tres personas de encontrarnos. Con un boleto que te llevó a todos lados, te seguí por detrás sin motivo alguno, también compre un boleto y me produjo  encontrarte por 3 segundos más en mi vida.

Quieres un romance como en las películas, la ultima vez que te vi por tres segundos parecías tenerlo, observé en tu rostro que estabas feliz, caminabas con alguien de la mano, voltee a la salida de la estación, esperé un par de minutos y no volviste corriendo a buscarme, supongo que llegué tarde a las audiciones, supongo que no soy parte de tu película.

Mente

Voy a escribir mi nombre con rocas en tu mente, asi ni el tiempo me moverá, permití que me abrieras los ojos, pero tuviste el descuido de ser lo primero que viera, una obsesión algo romántica, voy a escribir mi nombre con rocas en tu mente, asi ni el tiempo me olvidará.

Dejaré caer poco a poco mi esencia en tu memoria, la verdad desde que te has ido, no hago otra cosa más que recordarte, quiero que sientas lo que siento, también tatuaste tu nombre en mi mente. Alguna vez estuviste de este lado, pero eres iletrado al dejarme ver tu rostro. A veces te entiendo, otras cuantas creo que fui tan sólo un mal recuerdo.

Dime lo que sientas cuando escriba mi nombre con rocas en tu mente, pon por favor la misma cara de cuando me dices que entiendo sólo las cosas que nadie más entiende. Voy a colocar mi cabeza entre las piernas para ignorar nuestros temas pendientes, sin que lo quieras supuestamente, tienes un recuerdo que te gustaría borrar.

Avísame si el colocar rocas en tu mente desplaza ese supuesto recuerdo que quieres olvidar, yo por un instante, trataré de entender que tus piernas son fuertes. Quisiera compartir un ultimo momento, bien sabes que nuestra despedida está pendiente, recuerdo 36 cigarrillos y cuatro cervezas, haré un monumento de mi nombre en tu mente, ignoraré ciertos temas, colocaré por seguridad la cabeza entre mis piernas.

Ensayar

Puedo ensayar, alejarme poco a poco por la calle descuidada que me aproxima un par de minutos más de tu casa  a la mía.

Duelen las manos mientras te recuerdo por las rinconadas de mi cuerpo, puedo ensayar el no tenerte al lado mio, puedo ensayar mientras caminamos por un calle descuidada que da a las vías del tren y a un ultimo beso de mal gusto.

Debió quedarte más de un pez, déjalos también libres cerca de la vías del tren. Vuelve a jugar en los rincones de tu habitación, mientras que yo en las rinconadas de mi cuerpo.

No puedo, ni quiero rescatar tu nombre y rostro, como tú también arrojo todo a un costado de esta calle descuidada.

Tengo un par de mentiras tuyas, tatuadas en mi piel y otras cuantas escenas de una película en específico grabadas en la retina; voy a ensayar el no rescatarte y el acostumbrarme a no tenerte a mi lado, debió quedarte más de un pez, creo que tienes la misma memoria que uno, caminando por el costado de las vías del tren, mantienes el paso, y un beso de despedida de mal gusto.

Como en todo lo que haces, ensayo un poco más con cada día, me cuesta un poco ver con claridad tus supuestos rasgos nórdicos y tu nombre lo tengo anotado en algún lugar por si llegase a toparme con tu vida una vez más, te voy a arrojar, mentiras en la piel, tienes peces, palabras sin sentidos, pero te recuerdo que ensayo poco a poco para alejarme y olvidar.

   

---------------- Si esto fuera un libro se llamaría Claudio

Él

Saldremos de este lugar, me darás la mano y después de tres pasos me la soltarás, te miraré con cara de “no te entiendo” y tus ojos me dirán que es lo único que puedes hacer por el momento, negaré con mi cabeza, pero seré feliz. Cuando la vida imita las reflexiones, cuando dices cosas que no entiendo, hoy en la noche, pensé cosas que no debí haber pensado.

A veces pretendía ser él, tengo de aquí a una vida para entenderte y otra vida entera para no perdonarte. Compartimos un trauma, pero despiertas casi todas las mañanas pidiendo que te disculpen, a veces quisiera ser él y poder hacerlo; en las tardes que compartimos haciendo nada, tan sólo me limitas a hacer la sombra de alguien que se ha ido, del cual no tienes noticias, de alguien que te recuerda todos los días y que de conocerme, bueno tendría miedo de saber lo que él piensa.

Saldremos de este lugar, somos un par de chicos con una adicción clara al cigarrillo, damos tres pasos y sentimos que pasamos una eternidad al lado del otro, te conozco tal vez por alguna vida pasada, con tú mirada sé que no me entiendes o talvez no me crees, en mi cabeza y cuerpo; pensamientos y sensaciones de dependencias claras a ti y al cigarrillo.

A veces pretendí ser él, pero soy más, no puedes creer que existan personas como yo, me consideras algo falso y sobre optimista.